El servicio de mantenimiento ofrecido por Rodipa se distingue al estar respaldado por informes de inspección especializada (anuales o extraordinarios), según lo establecido en el Ítem 9 de la norma ABNT NBR 15524-2.

Una vez finalizada la inspección especializada, cada una de las patologías identificadas recibe un número de identificación único. Este número se utilizará en la formalización de la propuesta de mantenimiento, presupuestos comerciales y técnicos, y en la orden de servicio. De esta manera, el cliente sabrá exactamente qué se reparará, todo debidamente identificado y rastreable.

Una vez aprobado el presupuesto de mantenimiento, el siguiente paso es la visita de proyectos, donde se estudiará la mejor manera de realizar las reparaciones con el objetivo de reducir al máximo los impactos en la operación del cliente. Luego, el departamento de ingeniería verifica la metodología propuesta por los proyectos y dimensiona las piezas, que se envían a fabricación en nuestra planta industrial.

Una vez listos los materiales, se procede a su entrega, y el equipo de mantenimiento de Rodipa puede comenzar con los trabajos y realizar las reparaciones esperadas.

Durante el proceso de mantenimiento, el equipo tiene contacto directo con nuestro equipo técnico, lo que les permite resolver rápidamente cualquier duda relacionada con el proyecto y la ingeniería.

Al finalizar las actividades, los ingenieros de Rodipa realizan la liberación final y entregan el ART (Registro de Responsabilidad Técnica) al cliente.